Es una estrategia moderna de crecimiento y desarrollo personal.
Los grupos se reúnen una vez por semana, dos horas. Coordinados por un Psicólogo a cargo y se alternan en las mismas, la práctica de técnicas vivenciales con la interacción entre los diferentes miembros del grupo.
Algunas ventajas de estos grupos:
Constituyen una técnica en sí misma ya que
la fuerza del grupo es indispensable para elaborar y superar todos los síntomas con los
que el paciente acude a la ayuda psicoterapéutica (depresión, ataques de
pánico, problemas laborales, de pareja, angustias, etc.).
Brindan modelos para imitar y aprender, en virtud de la diversidad de problemáticas, edades y sexos.
Permiten practicar y ensayar diversas situaciones sociales, (por ejemplo mejorar vínculos entre padres e hijos o entre jefes y empleados).
Posibilitan el aprender a hacer nuevos amigos fuera y dentro del grupo.
Brindan apoyo para que las personas puedan crecer dentro y fuera del grupo, en un clima de contención y afecto.